RED FEDERAL DE CONCESIONES
El Gobierno avanza con la privatización de rutas nacionales y abre las ofertas económicas de la Etapa I
Luis Caputo anunció que las propuestas presentadas para concesionar más de 700 kilómetros de rutas fueron “por debajo del precio tope” y destacó que el proceso se realiza “sin subsidios y con inversión privada”.
El Gobierno Nacional anunció la apertura de las ofertas económicas recibidas para la privatización de tramos de rutas nacionales correspondientes a la Etapa I de la Red Federal de Concesiones (RFC), que abarca 741 kilómetros.
El ministro de Economía, Luis Caputo, informó que las ofertas presentadas por las empresas interesadas se ubicaron “por debajo del precio tope fijado en el pliego, garantizando eficiencia y transparencia”.
El funcionario remarcó que este esquema de concesión permitirá avanzar “sin subsidios, con inversión privada y con mejores rutas”, hacia “una infraestructura vial más moderna” que fomente la participación del sector privado y cuide “los recursos de todos los argentinos”.
“Este es el primer paso hacia una red vial moderna de más de 9.000 km concesionados, que mejorará la logística y reducirá costos para el sector productivo. Estas rutas, ubicadas en Buenos Aires, Entre Ríos, Santa Fe y Corrientes, son fundamentales para la producción, las exportaciones y la integración con Brasil y Uruguay”, escribió Caputo en sus redes sociales.
La Etapa I de la RFC fue lanzada en enero y cerró el pasado 5 de agosto, e incluye principalmente a las rutas nacionales 12 y 14, el Puente Rosario-Victoria y tres pasos fronterizos.
En paralelo, el Ministerio de Economía anunció una nueva licitación pública que amplía el proceso de privatización a más de 1.800 kilómetros adicionales de rutas nacionales en la Etapa II de la Red Federal de Concesiones.
Esta segunda etapa contempla el Tramo Sur–Atlántico–Acceso Sur, de 1.325 km, que incluye la RN 3, 205 y 206, además de las autopistas Riccheri, Newbery y Ezeiza–Cañuelas; y el Tramo Pampa, de 547 km, sobre la RN 5 (Luján–Santa Rosa).
Con este plan, el Gobierno busca consolidar una red vial de gestión privada que permita reducir costos logísticos, mejorar la competitividad del transporte de carga y optimizar el mantenimiento de las principales rutas del país.
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